El colegio ayuda a cumplir los objetivos de aprendizaje y los niños se sienten identificados, usando los mejores uniformes escolares consiguiendo además sensación de pertenencia. Ventajas importantes de la indumentaria escolarLas normas y disciplina que tienen que cumplir los menores son más fáciles de promover llevando las prendas, porque implica un recordatorio visual para los alumnos y la obligación de acatar las órdenes. En los institutos y colegios donde llevan uniformes existe menos presión social, evitando la discriminación entre compañeros y creando un ambiente donde todos son iguales, sin diferencias por el uso de otras prendas de marca. Una ventaja importante para limitar posibles problemas de estrés emocional, porque todos son iguales. Las camisas, faldas, zapatos o pantalones, son idénticos para no provocar comparaciones entre los alumnos, ni sentirse fuera del grupo. La idea que los niños tienen de su propia imagen, influye en el concepto personal, que determinará parte de su personalidad. Los uniformes escolares aunque no gustan a todos los alumnos al principio, se acostumbran rápidamente a llevarlos a diario. El beneficio de esta indumentaria es la fácil distinción en los estudiantes por parte de los profesores y autoridades, entre aquellos niños que pertenecen o no al establecimiento. Otra característica de estas prendas es evitar la entrada al colegio sin autorización de otras personas. Combinaciones idénticas en el colegioLos factores ventajosos de utilizar esta ropa con las particularidades de color, combinaciones de texturas y detalles identificativos, ayuda a mantener la atención en los estudios dejando de lado la moda, como elemento de competitividad entre los alumnos. El diseño de las prendas y estilos pueden distraer, además del elevado presupuesto que significa durante todos los años de colegio. El valor del uniforme escolar se encuentra en facilitar a diario la elección de la ropa para asistir a clase, sin necesidad de pensar todas las mañanas que vestimenta llevar con la consiguiente pérdida de tiempo que supone. Administradores y profesores ya no tendrán que indicar a los alumnos que ropa pueden usar en el centro de estudios, tampoco se comportarán como policías por este motivo con los niños. Un aspecto que diferencia estos colegios de otros, que no exigen uniformes y los niños en ocasiones no se visten apropiadamente, siendo los profesores quienes tienen que imponer disciplina y enfrentarse a padres o alumnos por las prendas poco adecuadas para el colegio y lugar donde asisten a diario para instruirse. | 
